La lógica de una inactividad deportiva por causas "X", conlleva a molestias colaterales en ciertas zonas del malogrado cuerpo, recordándonos a esos simpáticos simios llamados mandriles o en su defecto a la bandera del Japón. Si eres aficionado a este deporte sabes de lo que hablo.
Todo eso es subsanable con dos o tres salidas más con la bicicleta.
El tópico de un buen día se ha echo patente también hoy, dando crédito al buen rodar de estos niños, sabiendo que si se portan bien, reciben como premio un rato largo en el parque jugando con los columpios. Uso y libertad para ello han tenido, como muestran las instantáneas.
Han sido los momentos de ocio y diversión más entrañables de la ruta. Los niños han disfrutado mucho en el parque y han estado tranquilos y relajados el resto de la jornada. Jajaja...
Con once bicicletas cada una de un color se ha elegido una ruta "pintada" sobre un mapa por la que un track y un gps, nos guiaría en el recorrido de hoy.
Siempre el conocimiento del terreno en las cabezas de cada corredor, haría inútil las indicaciones mal descritas del artefacto electrónico. Pues, salvo en dos ocasiones, dicho aparato, no ha sabido guiarnos por donde estaba previsto, haciendo caso omiso a sus pitidos y avisos varios. (Gran lucha la del aparato en el día de hoy)
Saliendo con todas las ganas y luchando un largo trecho con el incesante viento que azotaba como siempre de frente, los primeros esfuerzos hacían mella en las piernas, hasta que una avería, nos obligaría detenernos para solucionar un pinchazo de campeonato.
Era el momento del "super clavo roñoso" buscador de interiores de ruedas.
Con la habilidad y maestría del implicado, el incidente se resolvió con prontitud, aprovechando el resto para descansar, recomponer peinados y retoques varios.
Una visita por los pueblos cercanos de la comarca tales como Batres, Serranillos del Valle, Griñón, Humanes de Madrid, Parla, Torrejón de la Calzada, Cubas de la Sagra y regreso a El Álamo.
Los kilómetros iban sumándose hasta llegar a las proximidades de nuestro destino y un último esfuerzo con tiempo para plasmar el paso del Arroyo del Sotillo, ha vuelto a despertar las risas de todos por las diferentes formas de cruzar las frías y cristalinas aguas.
AQUÍ. El paso del arroyo
Gracias a mis compañeros por el acogedor reencuentro que me han dado.
AQUÍ. Los once
AQUÍ. Mas fotos y videos
Ha vuelto nuestro cronista. Esto tiene color y calor de nuevo...
ResponderEliminarAure, espero aguantar al calor dando color. Abrazo.
EliminarMe alegro que ya estés de vuelta a las "andadas". Unsaludo
ResponderEliminarGracias Alberto, si no me castigan mucho, que dure la fiesta.
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